Cada vez más acuden a nuestra consulta padres que se van a separar y nos preguntan cuál es la mejor manera de explicárselo a los niños. Esto me parece maravilloso porque el hecho de que busquen ayuda para hacerlo bien ya es hacerlo bien.
La separación genera mucha angustia en los niños y de esa angustia acaban apareciendo los sentimientos de culpa, porque piensan “si me hubiera portado mejor igual ellos no se habrían separado”, o “si no me hubiera peleado tanto con mi hermanita ellos no se habrían separado”. Los niños tienen esa tendencia a auto culpabilizarse de todo. Cuando son un poquito mayores quizás pueden llegar a expresar estos sentimientos, pero cuando son pequeños no los entienden bien y simplemente se les quedan y notan la angustia.
Las repercusiones de esta situación que normalmente me encuentro en niños de entre 3 a 6 años de edad son: ansiedad, miedos sobre todo por la noche o miedo cuando tienen que ir a buscar algo solos a otra habitación, somatizaciones, dolores de estómago, dolores de cabeza, regresiones volviendo a etapas que ya tenían superadas. Es como si dieran algunos pasos atrás como por ejemplo que se les vuelve a escapar el pipí o se aguantan la caca. También es muy común que aparezcan conductas muy impulsivas por no ser capaces de gestionar enfados o externalizan el sentimiento de rabia.
En este artículo encontrarás una guía que te ayudará en todo el proceso de explicarles a tus hijos que os separáis y ayudarte a bajar el nivel de angustia de tus hijos.
1. ¿Les explico la verdad?
Esta pregunta tiene una única respuesta. Los niños necesitan que les expliquemos la verdad, adaptándola a su edad. No es bueno que les maquillamos muchísimo una historia o que les expliquemos otra cosa distinta, porque si lo hacemos, poco a poco irán descubriendo que esa historia que les hemos contado es irreal y es como ir torturándolos poco a poco. Van descubriendo con las pequeñas cosas del día a día que sus padres les han mentido. Os pongo varios ejemplos de lo que yo me encontrado en consulta para que entendáis a qué me refiero:
Los niños necesitan que les expliquemos la verdad, adaptándola a su edad.
“Papá se ha ido porque ahora tiene que vivir con la abuelita porque necesita cuidarla» No, no es cierto que papá se ha ido por eso. ¿Entonces qué ocurre? El tiempo pasa y papá no vuelve; papá y mamá no se hacen mitos o cariños; que la abuelita está bien. El niño va atando cabos y va viendo que lo que le has explicado no es cierto. Esa situación que se alarga en el tiempo en la que el niño percibe esa inseguridad, es desastrosa. Habitualmente genera una angustia que hace aparecer sentimientos de culpa en el menor.
Por lo tanto, hay que explicarles la verdad, que papá y mamá se separan. Los niños son pequeñitos pero no los menosprecies y explicarles la verdadera situación. Eso les generará más seguridad y el sentimiento de angustia se reducirá mucho más rápido en el tiempo.
Expliquemos la verdad, pero una verdad adaptada a su edad. Por ejemplo, muchas veces cuando las separaciones vienen por terceras personas, los padres y madres dolidos y movidos por la tristeza, les dicen a los niños que papá o mamá se ha ido porque se ha enamorado de otra persona y ya no quiere estar con él. Esto genera muchísimas dudas, porque para empezar, pone en duda que el amor sea para siempre y ellos pueden llegar a pensar que si no es para siempre, el amor hacia ellos también se puede acabar. Es muy importante diferenciar entre el amor de enamoramiento de pareja y el amor paternal o maternal que es para toda la vida. Por ejemplo, puedes explicarles que os habéis separado porque ya no estáis enamorados y ya no sois novios.
2. ¿Qué va a cambiar con la separación?
Tienes que dejarles muy claro lo que va a cambiar y lo que no, dándole mucha importancia a lo que no va a cambiar. Tienes que pensar que cuantos menos cambios para ellos mucho mejor, pero que evidentemente van a cambiar muchas cosas.
Tienes que dejarles muy claro lo que va a cambiar y lo que no, dándole mucha importancia a lo que no va a cambiar.
Se lo explicamos porque son capaces de entenderlo, por ejemplo: “papá y mamá van a vivir separados. Las vacaciones a partir de ahora las haremos separados, etc.” Las pequeñas cosas que van a cambiar las explicas y a continuación explicas todo lo que no va a cambiar. ¿Qué es lo que no va a cambiar? aparte del amor hacia ellos, pues situaciones concretas. “No vas a cambiar de colegio, vas a seguir viendo a los abuelos los fines de semana, vas a seguir teniendo a tus amigos, seguirás haciendo las extraescolares que haces, etc.”. Porque enumerar todas las cosas que no van a cambiar en su vida les va a dar seguridad en este proceso tan angustioso.
Explícales que se rompe la pareja pero no la unidad familiar, que es lo que ellos entienden que forman parte. Para esto me gusta mucho usar el término novios, porque es un rol con el que ellos juegan en el patio del colegio, y entienden que es un concepto que puede no ser duradero en el tiempo. Por ejemplo «papá y mamá os seguimos queriendo muchísimo pero ya no nos queremos como novios. Os vamos a querer siempre porque somos vuestro papá y mamá y somos felices cuando jugamos con vosotros, cuando os leemos un cuento por la noche, cuando vamos a merendar juntos…” Ese concepto de amor parental, de lo que os gusta hacer juntos a los papás, se sigue manteniendo.
3. Daros las gracias delante de vuestros hijos
Puede ser una situación difícil en estos momentos para algunas parejas, pero tienes que poner por delante el bienestar de tus hijos. Se trata de daros las gracias delante de los niños al papá y a la mamá por que os habéis dado unos hijos maravillosos. Por ejemplo: “voy a querer siempre a papá porque junto a él he podido tener a estos hijos maravillosos, así que muchas gracias papá por habérmelos dado, eres el mejor papá que podía encontrar para mis niños”. Lo mismo el papá le da las gracias a mamá delante de los niños, así ellos entienden que ese amor de familia siempre estará allí y lo que se ha roto es el amor de “novios”.
4. Dejarles claro que la separación es para siempre
Dejar muy claro que es una decisión para siempre. Dejar puertas abiertas genera angustia. Ya nos pasa a los adultos que cuando dejamos puertas abiertas estamos en esta tortura constante, pero a los niños les afecta mucho más. Dejar claro que es una decisión que se ha tomado y que es algo que será para siempre. Evidentemente no sabemos si la situación cambiará dentro de unos años, la vida da muchas vueltas y todo puede cambiar, pero no les dejemos puertas abiertas porque eso les genera muchas dudas.
Déjales claro que la separación es para siempre aunque pienses que puede cambiar en el futuro. Dejar puertas abiertas genera mucha angustia.
También me refiero que, en algunas situaciones del día a día, tenemos que ser coherentes con esta idea de que no va a cambiar. Por ejemplo, está bien que si celebramos el cumpleaños de nuestros hijos, nuestra anterior pareja venga al cumpleaños, porque los niños pueden entender que en el cumpleaños los papás se juntan para celebrarlo. En cambio, les provocaría mucha angustia que cada viernes por la noche papá y mamá se junten en casa para ver una peli y que papá se quede a dormir. Eso provocaría muchas dudas, porque los niños crean fantasías. Son fantasías que nosotros podemos tener claro que no van a suceder pero ellos siempre querrán que pasen. Por eso volveríamos a la rueda de generar angustia, culpa, dudas sobre el futuro y lo que va a pasar. Volvemos a la inseguridad, problemas con la autoestima, con el autoconcepto, entre otros.
Espero que con este pequeño guion te ayude en el proceso de comunicarle a tus hijos que os separáis, que aunque no te lo parezca, es un proceso mucho más difícil para vosotros que para los niños, siempre que tomes las decisiones pensando en el bienestar de los más pequeños.
También puedes ver el vídeo sobre como explicarle el divorcio a los niños.
